Hoy cabe resaltar las miles de sonrisas, la panza a punto de reventar, los dolores de mejilla, alguna que otra escupida de comida... aquellos momentos que ríes sin parar, que aveces olvidamos y no nos damos cuenta del porque.
Un 12 de octubre, un hoy, un día como cualquiera, en donde debo celebrar. Es el momento en donde me despojo de cosas inútiles: vicios, hábitos... algunos sentimientos y pensamientos.
Hoy un día como cualquiera, un año más de yo; los cálidos abrazos, los buenos deseos, y el cariño sin cesar. Hoy me miro al espejo y pienso ¿Qué sucederá? pero también pienso y digo ¡espera! disfruta el momento hay que celebrar.
Hoy un año más SONRIÓ.